Ando's

Sobre mi

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Mi verdadero nombre no es Ando, pero tampoco me apetece publicarlo.

Trabajo desarrollando software, especialmente aplicaciones web, desde hace ya 10 años.

De pequeño me caí en una marmita de código fuente. Tuve la suerte de nacer en una familia donde se valoraba el potencial de la computación, aunque en esa época los ordenadores fueran menos potentes que los dispositivos que prácticamente todos llevamos hoy en el bolsillo.

Aprendí las bases de programación desde bien chiquito, gracias a mi madre. Aunque al principio me dedicaba más a hacer trastadas que otra cosa. Programar no era más que una herramienta para poder tener mis propios exploits y entender los de los demás.

Renegué durante bastante tiempo del oficio, no quería ser programador y venderme a una empresa tiránica que usara mis habilidades para lucrarse. Pero descubrí la satisfacción que conlleva crear algo de la nada. Empecé a estudiar ingeniería informática pero tuve que ponerme a trabajar y acabé dejándolo.

Tras unos años trabajando, decidí intentar sacarme un grado de formación profesional.

Fue bastante fácil, ya que la mayoría de conocimientos ya los tenía, pero no por ello menos útil. Lo disfruté mucho, me ayudó a pulir el estilo de mi código, a aplicar patrones y a hacer las cosas de esa manera que se supone que siempre tienen que hacerse pero que al final dejan de hacerse.

También hice buenos amigos por el camino, aunque ya a día de hoy a penas tenga contacto con ellos. La vida da muchas vueltas.

Por fin podía trabajar como desarrollador. Empecé con algunos proyectos web para pequeñas empresas del pueblo en el que vivía pero pronto me di cuenta de que si quería seguir progresando tenía que moverme a una ciudad más grande. En aquella época trabajar en remoto era un sueño todavía no cumplido, para mi y para prácticamente cualquiera.

Tras mucho esfuerzo y ahorro, mi pareja y yo decidimos mudarnos a una ciudad. Paradójicamente conseguí trabajar un tiempo en remoto tras mudarme, para las empresas que había dejado atrás en el pueblo y que seguían necesitando mis servicios de vez en cuando.

Después de varios meses buscando activamente conseguí que me contratasen en una empresa relativamente grande. Allí tuve que empezar desde abajo, ya que mi experiencia no la valoraban y era una época bastante dura para el mercado laboral.

Si quieres ayudarme a no morir de hambre puedes hacer una donación en XMR a:

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